Zapatos de la abuela ¿los tiras?

Timeless Elegance

Komondors Vintage Shop, Café & Bar

26-01-2024 Budapest, Hungría

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¿Se puede hablar de una pasarela de modas sin ningún diseño “original”? El día viernes 26 de enero se organizó en Budapest una propuesta interesante que precisamente hace reflexionar sobre este tema. Con las “tendencias” sostenibles y la “nueva pasión” vintage- ¿necesidad económica de estudiantes con poco presupuesto o realmente la juventud tiene una búsqueda tan profunda de salvar el planeta? – muchas de las grandes marcas también se lo plantean.

Precisamente para ello, como profesional y persona, debo decir que es muy complicado dar una respuesta blanco o negro a esta cuestión. El mundo del arte sabe con diferencia que simplemente la palabra original ya genera muchos conflictos. -Las mecánicas de la producción artística y, sobre todo, el arte siendo un reflejo más de sí mismo que de cualquier otra cosa, ha logrado que la disputa sobre lo original le interese más al mercado que al resto del gremio artístico-. Aun así, es uno de los más grandes mitos a cumplir para el éxito o fracaso de cualquier proyecto hoy en día.

La propuesta presentada el día viernes, tiene todos aquellos adjetivos que pueden definir a los jóvenes modernos de hoy: inclusivo, sostenible y, muy importante para el mundo del arte, exclusivo. -Contradictorio cuando utilizamos la palabra inclusivo, pero al final eso es lo que buscamos todos. Ser tan únicos y sin igual, prácticamente, un ser humano sinónimo de original-. Y, precisamente, el mundo de la moda gobierna con diferencia en intentar portar esas tres categorías, por lo tanto, no hay nada nuevo, literalmente. Hoy los jóvenes modernos nos hemos adaptado rápidamente a la “pasión” vintage, porque, utilizar piezas que ya no están en producción nutre nuestra necesidad de “originalidad”. -Aunque bien sabemos que somos todos figuras de producción masiva, como lo ha demostrado la religión contemporánea con más seguidores a nivel mundial: el marketing. –

Modelo Veronika: @nironika_

Con todo, debo decir que el evento cumplió con los objetivos esperados de él, sobre todo, generar una propuesta estilística que responda a las necesidades de estos modernistas jóvenes apasionados de las tiendas de segunda mano. Sin embargo, no trae a la mesa ninguna prenda “original” -hecha exclusivamente para esta “temporada” a presentar-. Respondiendo a las inquietudes de cómo generar una industria más sana y no parecer tu abuela en el intento. -Eso sí, no todo vale y, en algunas casos, los atuendos deberían pensarse dos veces antes de salir de casa. Además, hay que tener mucha personalidad, y aguante al frío, si deseas llevar alguna de estas ideas por las calles-. En todo caso, siempre en un mar de ropa, se puede encontrar algo que inspire a todos aquellos que nuestra pasión es generar atuendos icónicos y exclusivos con las prendas que ya tenemos en el armario -necesidad que responde a tener que acomodarnos a un presupuesto bajo por ser personas primerizas en este mundo del arte-.

Como nota personal, me quedo enamorada del lugar, la proyección de la actividad y de mis dos grandes preferidos en la moda actual: las botas vaqueras y las piezas en rojo. Lo mejor de ello, estilizado en un solo atuendo, con una idea lo suficientemente clara para que valga la pena enfrentarse al mundo real con ello. Y, a modo de despedida, mencionar mis agradecimiento a Veronika (@nironika_ en Instagram) Por permitirme capturar esta gran idea. Muy seguramente, en un futuro, será imitado con piezas que ya se encuentren en mi armario.

Lov u all!

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